Estudio de mercado
Una marca que no investiga, simplemente adivina
Vender sin entender el mercado es como lanzar dardos con los ojos cerrados.
Muchas marcas fracasan no porque su producto sea malo, sino porque no saben a quién se lo están vendiendo, qué está haciendo su competencia o cómo se comporta realmente su consumidor.
Tomar decisiones sin datos es caro, lento y muchas veces irreversible.
Sin un estudio de mercado, no hay claridad en el posicionamiento, no hay foco en la comunicación y no hay certeza en la estrategia.
¿Cómo lo hacemos?
Entorno competitivo
Identificación y evaluación de los principales competidores directos e indirectos. Se analizan sus fortalezas, debilidades, propuesta de valor, canales de comunicación y posicionamiento. Esto permite definir oportunidades claras de diferenciación.
Perfil
Definición de segmentos clave de audiencia y construcción de buyer personas. Se estudian hábitos de consumo, necesidades, objeciones, canales de contacto y nivel de conciencia. Esto permite diseñar mensajes y estrategias que realmente conecten.
Estudio geográfico
Análisis de la distribución territorial del mercado potencial y clientes actuales. Identificación de zonas de mayor concentración, tendencias de consumo por ubicación y comportamiento según grupo generacional, nivel socioeconómico y actividad comercial.
Evaluación de los medios digitales más utilizados por el target: redes sociales, buscadores, plataformas de compra, foros, etc. Esta etapa permite determinar en qué canales debe estar presente la marca y qué tipo de contenido debe generar.
Análisis de canales
